El renovado y rebautizado ciclo Danza Málaga (DZM) comenzó el 29 de octubre con la estancia de dos semanas de No amanece en Génova, una producción de Factoría Echegaray que coreografió y dirigió Nieves Rosales sobre texto de Raúl Cortés, y el jueves 14 de noviembre estrenó Inductive, montaje del coreógrafo y bailarín David Segura y el artista plástico Alberto Tarsicio. Mostró su faceta más internacional y experimental con la presencia del suizo Gilles Jobin en el Echegaray, donde se vio y sintió el espectáculo de realidad virtual inmersiva VR_I, y de las compañías hispano-italiana Kor’sia y coreana K-arts Dance Company en el Cervantes, con respectivamente The lamb, coreografía de Mattia Russo y Antonio de Rosa, y un programa doble con Bow, de la prestigiosa coreógrafa Jeon Misook, y No comment, de Shin Chang-ho.
Tras las citas con Fernando Hurtado, el Echegaray se abre el viernes a la vertiente experimental de Osa+Mujika (Suddenly III, 22 de noviembre). DZM continuará los días 22 y 23 con la Electra del Ballet Nacional de España. Su segunda función coincidirá con el estreno en el Echegaray de El arte de envejecer, de la malagueña Ana Rando, a la que seguirá el infantil Gaia, de Entremans.(24), y la esperada visita de la alabada Carmen.maquia de Titoyaya Dansa (24 en el Cervantes), que precederá a otro de los puntos fuertes del cartel, el Malandain Ballet Biarritz, que pondrá en escena el 26 Marie-Antoinette, un encargo de la Ópera Real de Versalles de inspiración neoclásica.
El clasicismo proseguió con el Romeo y Julieta del Ballet Nacional Ruso de Sergei Radchenko (27 de noviembre) y para terminar el ciclo, esta semana nos espera La bella durmiente del Ballet Clásico de San Petersburgo de Andrey Batalov (11 de diciembre), entre los que se escenificará un Blancanieves para niños desde 4 años (1 de diciembre). DZM concluirá con una inmensa bailaora de la tierra, La Lupi, que enseñará su Lenguaje oculto el 14 de diciembre, y se redondeará con una rama didáctica que incluye las clases magistrales de Antonio Ruz (coreógrafo de Electra), Richard Coudray (Malandain Ballet Biarritz) y Cesc Gelabert (Cía. Gelabert & Azzopardi) en el Conservatorio Superior de Danza.
Dolida y rota, la mujer incapaz de seguir su camino, entra en ese mundo de ensueño en el que revive el aprendizaje, el desamor, su verdad…y al cerrar los ojos, lo ocurrido desaparece como llegó. No siendo más que el capricho de un sueño de imágenes reales que se volatilizan al despertar. En 1999 se crea la “Compañía Flamenca La Lupi” que cuenta con grandes artistas de primera línea del Flamenco y otras disciplinas, así como un gran equipo técnico de profesionales. Todos ellos hacen posible, que los espectáculos de la Compañía puedan presentarse en teatros y festivales más importantes del mundo.