Las cien mercantiles que participaron en el I Encuentro de Networking de Empresas de los Sectores Turístico y Náutico, celebrado el pasado 13 de septiembre abordo del catamarán Pura Vida de Albarco, ubicado en Puerto Sotogrande, llegaron a varias conclusiones de interés a través de las actividades de networking que se celebraron durante el evento: todos los asistentes coincidieron en que debe haber más unión, más comunicación y más colaboración entre las empresas y que éstas deben pensar como territorio. También se llegó al consenso sobre que la sostenibilidad debe salir de la política de Responsabilidad Social Corporativa de las diferentes entidades para convertirse en un área central de la acción empresarial con el fin de cambiar realmente las cosas.
El evento fue organizado por el Círculo Empresarial de Networking de Cádiz (Eventos CEN), la Asociación de Empresas Turísticas de la Provincia de Cádiz (AETC) y el Clúster Marítimo-Marino de Andalucía (CMMA).Colaboraron la Consejería de Turismo, Deporte y Cultura, Turismo Andaluz, el Ilustre Ayuntamiento de San Roque, Puerto Sotogrande (uno de los puertos deportivos más grandes de España y con un entorno privilegiado para un evento de esta naturaleza), el catamarán Pura Vida de Albarco, Momento Andaluz Catering, Skynard, Good! y Soto Audio.
Cádiz atrae cada año a numerosos turistas nacionales e internacionales y es una provincia clave en las estrategias promocionales de Andalucía y el país por su gastronomía, su historia y la naturaleza como principales atractivos.
Durante el transcurso del evento, hubo una dinámica que consistió en conformar cinco grupos de entre 15 y20 empresas asistentes, nombrando a un portavoz, de forma que se debatieron temas de actualidad. Los temas a tratar en 5 grupos fueron náutica, innovación, sostenibilidad, inclusividad y patrimonio. En el grupo de la náutica, se llegó a la conclusión de que los agentes del sector no se comunican entre sí; es decir, que debe haber, primero, más concienciación, seguido de más comunicación, más colaboración, más unión y, con los servicios complementarios de cada empresa, poder ofrecer servicios más competitivos al cliente, pero sin competir entre las empresas, sino buscándola complementariedad. También se reflexionó sobre la formación.
En innovación, se concluyó que las empresas ya llevan en su ADN esta característica, que se definió como la solución disruptiva y creativa a una serie de problemas. En relación a estos problemas que tiene el sector turístico en Cádiz, se nombraron la fuerte estacionalidad, los problemas de infraestructuras (conectividad en el territorio) así como de sostenibilidad (agua y cuidado de los mares), la falta de una educación ambiental y turística que permita respetar los recursos y hacer del destino un lugar más amable. Y, de nuevo, surgió en este grupo la falta de colaboración entre las distintas empresas para dar con soluciones creativas para innovar en el turismo.
En sostenibilidad, la conclusión fue clara: todas las empresas trabajan en esta área desde hace tiempo, pero no de forma conjunta y es fundamental la generación de un destino sostenible, que se elige cuando se cuida precisamente este tema. Todo ello se puede conseguir en ámbitos como la edificación, la gastronomía, la parte legal, el medio ambiente, la arquitectura, el urbanismo, la artesanía y la comunicación. Eso sí, todo lo vinculado debe estar fuera de la Responsabilidad Social Corporativa de las empresas, de forma que sea una política concreta que afecte por igual a todas las áreas de la corporación.
En cuanto al grupo de inclusividad, se recordó que esta es transversal, es decir, que todas las personas, en algún momento de su vida, de forma temporal o definitiva, van a necesitar de servicios de esta naturaleza y por tanto es necesario que los destinos turísticos sean inclusivos y accesibles. La inclusividad beneficia a toda la sociedad, no solo a quienes poseen algún tipo de discapacidad auditiva, visual u orgánica. En segundo lugar, es necesario validar los recursos en materia de inclusividad con un sello o una marca tanto para los municipios como para los negocios y también se recordó que una única persona que tenga alguna necesidad en este sentido puede cambiar la opción de compra del resto de su grupo, por lo que es importante que empresas y territorios impulsen este tipo de políticas desde una óptica transversal.
El grupo de patrimonio analizó la herencia cultural y la natural con el fin de fomentar un turismo de calidad, relacionado con el turismo náutico. Algunas empresas tienen clientes que demandan ese turismo y ello noles llega porque estas firmas no se conocen entre sí. El día a día, dicen, les impide muchas veces ponerse en contacto con otras empresas del territorio, conocer más ofertas, lo que redundaría, al final, en beneficio de todos a través de una oferta de servicios más amplia y complementaria. Entre las empresas hay quienes tienen el cliente y otras que tienen el producto, por lo que entre ambas partes debería haber más conexión y buscar esa complementariedad. Hay que mejorar la comunicación interempresarial en este sentido. La náutica y el turismo cultural pueden ir de la mano, concluyeron. También es fundamental la movilidad. Otro problema es la estacionalidad: en un momento del verano, hay muchos turistas en la misma zona y eso crea problemas de movilidad, indicaron los empresarios. En cuanto a la estacionalidad, es necesario ya no solo potenciar el turismo náutico, sino otros segmentos como el turismo enológico, el etnológico, etc.
Todos los asistentes, al finalizar la jornada se mostraron satisfechos y contentos de la actividad que gozó de una climatología insuperable, con un paisaje inolvidable.
Los organizadores, a su vez, se mostraron muy contentos del éxito del evento, que esperan poder repetir el año que viene.
