Pablo Alborán (nacido en Málaga) es profeta en su tierra y así lo dejó patente anoche en su primera visita a Starlite Festival, donde se agotaron las localidades a la venta.
El artista ofreció uno de los conciertos más emocionantes de este verano. “Por fin se cumple un sueño. Es mi primera vez en Starlite, la primera vez aquí, en mi tierra. Este es un lugar único, mágico, donde voy a estar acompañado por mucha gente que me quiere. Lo único que tenemos que hacer es disfrutar”, dijo Alborán momentos antes de salir al escenario.
Los acordes de No vaya a ser pusieron las alertas de los miles de incondicionales que esperaban ansiosos la salida del malagueño sobre las tablas, de su nuevo trabajo Prometo, a la que sucedieron Pasos cero y La escalera, de su álbum Terral.
El cantautor malagueño tenía preparado para anoche “un concierto más personal e intimista”, como adelantó a Starlite antes de salir a escena. Así, además de interpretar numerosos temas de Prometo, no defraudó con canciones como Quién, del álbum Tanto; Recuérdame y Quimera, de Terral.
“Este es el paraíso” gritó a sus fans un emotivo Pablo Alborán que “volvió en cada sueño”, con su tema Saturno, que acompañó con una impresionante puesta en escena con vídeos del planeta anillado.
Y le “dolió de más el silencio”, en La Llave; y gritó “te amo, te amo, te amo” a su auditorio tras Tu Refugio; y lanzó un alegato al amor, en contra del racismo y de las injusticias, con Tu boca de hule; y fue timonel “en su propio barco”, en Vivir… Un sinfín de letras comprometidas con el amor como hilo conductor y como fuente de esperanza.
El concierto fue un suceder de emociones, que culminaron con Pablo Alborán al piano tocando Solamente tú y Prometo, para éxtasis de sus seguidores, que se despidieron con los acordes de Extasis y Vívela. Un concierto, sin duda, que permanecerá en la retina del público que abarrotaba la cantera.
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